¡Operación tutú!
Seguimos con los consejos para la quema de grasa de los muslos. EStas ricas infusiones, combinadas con los ejercicios indicados, dieta equilibrada y rutina diaria de clases y ensayos; harán que notes mayores resultados en la mejoría de las piernas.
Infusión de fresas con corteza de limón: es un remedio sensacional para depurar el organismo, combatir la retención de líquidos y favorecer la circulación sanguínea. Además, su alto contenido en antioxidantes nos va a ayudar a renovar todas esas células inflamadas que se concentran en los muslos y que originan la piel de naranja.
La corteza de un limón
10 fresas limpias
Un litro de agua
Calienta el litro de agua hasta que hierva, añade entonces la cáscara de limón y las fresas, deja cocer durante 20 minutos. Pasado el tiempo baja el fuego, retira las cortezas de limón y pasa por la batidora hasta conseguir una mezcla completamente homogénea.
Puedes tomarlo caliente o frío, según tu gusto.
*Tomar una taza después de cada comida.
Infusión de pomelo y té verde: como ya sabes, el pomelo (toronja) es un aliado perfecto a la hora de perder peso. Ahora bien, debes saber que, combinándolo con el té verde, conseguiremos una infusión más que perfecta para acelerar el metabolismo, combatir la retención de líquidos y disminuir la molesta celulitis y grasa de los muslos.
Un pomelo (toronja).
20 gramos de té verde.
Un vaso de agua (200 ml).
Una vez hecha la infusión de té verde como siempre, mézclala con el jugo del pomelo recién exprimido (puedes colarlo) y endulza con un poco de miel.
*Tómala tibia, después de cada almuerzo.
Infusión de piña y diente de león: La piña, es una fruta ideal para combatir la celulitis. Gracias a la bromelina no solo conseguimos depurar el organismo y evitar retenciones de líquidos, sino que, además, trata muy bien la inflamación de esas células que originan la piel de naranja. Absorbe las toxinas ahí concentradas y nos ayuda a eliminarlas. ¡Es sensacional! Y si la unimos al diente de león, favorecemos aún más la circulación sanguínea y el que nuestro hígado depure mucho mejor las toxinas. No lo dudes, esta infusión será tu mejor aliada.
2 rodajas de piña.
20 gramos de diente de león.
Un vaso de agua (200 ml).
Calentar el vaso de agua. Una vez esté hirviendo, añade las dos rodajas de piña y los 20 gramos de diente de león, y deja que se realice una adecuada cocción a lo largo de 20 minutos. Pasado ese tiempo, filtraremos toda la infusión por un colador para retirar las rodajas de piña y los restos del diente de león.
*Tómala bien caliente cada noche después de la cena. Puedes endulzarla con un poquito de miel.
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